El título que Harry y Meghan no quisieron para Archie

Archie Harrison cumple 2 años a punto de dejar de ser el único protagonista de la familia de los duques de Sussex. Al hijo mayor de Meghan Markle y el príncipe Harry le queda poco tiempo de ser hijo único para convertirse en hermano mayor de una niña a la que, según algunas fuentes cercanas, el matrimonio tiene la intención de llamar Diana en homenaje a la madre del Príncipe.

Pero mientras ese momento llega, por ahora Archie sigue concentrando toda la atención de la pareja. El pequeño celebra su segundo año de vida de la misma discreta manera que cumplió el primero. Instalados en su nueva residencia de Santa Barbara, se espera que los Sussex distribuyan algún tipo de fotografía oficial del niño con motivo de este aniversario, como ya hicieron en su primer cumpleaños o en Navidad. Sin embargo, por ahora no cuentan con un canal oficial en Instagram, de manera que recurren a diversas instituciones, aunque cabe la posibilidad de que en esta ocasión opten por hacerlo mediante la web de Archewell.

Al margen de los temas relacionados con el cumpleaños de Archie, lo cierto es que la vida de los Sussex se encuentra en un punto de inflexión. La entrevista que la pareja concedió a Oprah Winfrey hace unos meses generó un importante malestar entre los Windsor, de hecho, cuando Harry regresó a Londres para asistir al funeral por el duque de Edimburgo, no todos los miembros de la familia le recibieron con los brazos abiertos y su estancia en Reino Unido se limitó a lo estrictamente necesario, hasta el punto que ni siquiera se quedó a acompañar a la Reina en su cumpleaños más difícil.

Uno de los temas de los que Meghan habló en su conversación con Oprah Winfrey fue del hecho de que Archie no fuera príncipe y del presunto comportamiento racista por parte de algunos miembros de la familia. Según Meghan, a Archie se le negó la posibilidad de ser príncipe y ostentar la dignidad de Alteza Real. Sin embargo, la realidad es diferente.

Según la legislación vigente desde 1917 por expreso deseo de Jorge V, solo los hijos del monarca, sus nietos y los bisnietos que proceden directamente de la línea inmediata a la sucesión pueden ser príncipes. Esto significa que solo Guillermo y su hijo mayor, aunque cuando Kate Middleton se quedó embarazada de Charlotte, la Reina firmó una Carta Patente para que todos los hijos de los Cambridge fueran príncipes, algo que podía haber hecho con Archie. No obstante, los propios Sussex declararon que querían que sus hijos llevaran una vida normal, de la misma manera que hicieron algunos de los hijos de la reina Isabel, como la princesa Ana o los condes de Wessex, a cuyos hijos les corresponde por derecho el título de príncipes y no lo llevan.

Sin embargo, el caso de Archie podría cambiar cuando Carlos fuera rey, ya que sería nieto directo del monarca, aunque la situación actual lo hace improbable. De la misma manera, no se espera que su hermana ostente ningún tipo de título, ni ahora ni en el futuro.

Conde de Dumbarton

Aunque fueron los propios Sussex quienes cuando nació su primer hijo aseguraron que quería que llevase una vida normal, lo cierto es que sí que hay un título al que Archie podría haber aspirado desde su nacimiento y que su hermana no. Se trata del de conde de Dumbarton, que la reina Isabel otorgó a Harry tras su boda, a la vez que Sussex y el de Barón de Kilkeel. Como hijo primogénito de un duque, Archie podría haberse convertido en conde de Dumbarton o en Barón de Kilkeel, y todavía existe esa posibilidad. Esto es algo reservado únicamente a los hijos varones y no aplica a las mujeres. De la misma manera, Archie tendrá derecho a heredar el de duque de Sussex en el futuro. Una realidad que, por ahora, se antoja bastante remota.